Los préstamos estudiantiles federales se rigen por las directrices del Departamento de Educación de EE. UU. y normalmente se ofrecen a tasas fijas y más bajas que las de los préstamos privados. Sin embargo, en los préstamos federales, a diferencia de los privados, existen límites en la cantidad a financiar, la cual puede ser insuficiente para cubir todos los costos de tus estudios.
Los préstamos privados le ayudan a los estudiantes a cubrir la diferencia entre lo que cuestan los estudios y la cantidad obtenida a través de préstamos federales, pensiones y becas.
Tanto los privados como los federales normalmente les permiten a los estudiantes diferir el pago de capital e intereses mientras continúan estudiando y algunos ofrecen la opción de moratoria de pagos una vez que el estudiante termina sus estudios. A diferencia de los programas de préstamos federales, los prestamistas privados evalúan el historial crediticio de la persona y su aval antes de otorgar el préstamo.